Los tribunales injustos y el justo juicio de Dios
Dios es una piedra que convierte la arrogancia humana en polvo, pero también es el fuerte castillo de protección para su pueblo.
Dios es una piedra que convierte la arrogancia humana en polvo, pero también es el fuerte castillo de protección para su pueblo.
El profeta Agabus le advirtió que sería arrestado en Jerusalén. Pero el veterano apóstol no se dejó intimidar.
No podemos tener éxito en la obra de Dios sin la conciencia de que el comisario es también nuestro compañero de viaje.
A veces tenemos muy poca prisa. Otras veces, tenemos demasiada prisa. En algunas ocasiones, Dios nos apura.
En esto sabemos lo que es el amor: Jesucristo dio su vida por nosotros, y nosotros debemos dar la vida…
La paz sobrenatural, que Cristo nos da, tiene que ver con nuestra posición ante Dios…
El Señor es mi luz y mi salvación; ¿de quién tendré miedo? El Señor es la fuerza de mi vida; ¿a quién temeré?
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